miércoles, 16 de noviembre de 2016

LAVINIA FONTANA, pintora de desnudos.



Autorretrato de la artista 

LAVINIA FONTANA (Bolonia 1552- Roma 11 de agosto,1614)
Primera mujer pintora de desnudos.
Considerada como la artista pictórica más prolífica del barroco, pintó unas 135 obras y trabajó dentro de la misma esfera que sus homólogos masculinos, fuera de un convento, donde ni siquiera figuran sus nombres como autoras.
Lavinia fue hija del pintor Próspero Fontana, quien fue un destacado pintor de la Escuela de Bolonia, sirviéndole de maestro en aquel momento, ella continuó con el negocio de la familia como era típico de la época. Su primera obra conocida, "Mono Niño", fue pintado en 1575 a la edad de 23 años. Al principio de su carrera, fue famosa por pintar a los nobles residentes de su ciudad natal y comenzó su práctica comercial pintando pequeños cuadros de devoción en el cobre, el cual tenía un atractivo popular como regalo papal a los diplomáticos, dado el valor y el brillo del metal. Mientras que su estilo juvenil fue muy parecido al de su padre, ella adoptó gradualmente una fuerte coloración casi veneciana.
En 1577 casó con Paolo Zappi, un alumno de su padre. Poco dotado para la pintura, después del matrimonio, ella continuó pintando para mantener a su numerosa familia. Dio a luz 11 hijos, aunque sólo 3 sobrevivieron después de la muerte de ella. Paolo que era de noble familia se hizo cargo de la casa, cuidando de los hijos y se desempeñó como asistente de pintura de su esposa, pintando los elementos menores de los cuadros.
Fontana pintó gran variedad de géneros. Su Autorretrato -se dice que era muy guapa en su juventud- fue quizás su obra maestra, en él establece un equilibrio entre la presentación de la artista como una dama distinguida y como artista profesional. Además de los retratos, un tema típico de los pintores, más tarde creó cuadros de gran formato con temas religiosos y mitológicos en los que incluía desnudos, algo inexistente en las pintoras femeninas. Algunos de sus retratos, se atribuyeron erróneamente a Guido Reni, después, fue encontrada documentación en la que se detallaba el generoso pago a Lavinia , incluidos los cuadros de "Venus", "La Virgen levantando el velo", "Cristo dormido" y "la Reina de Saba visita a Salomón". La corte española le encargó el retablo de la "Sagrada Familia con san Juanito" para el Monasterio de El Escorial, pagando por él la alta cifra de 1000 ducados.
En 1603 Lavinia y su familia se trasladaron a Roma, por invitación del Papa Clemente VIII, ganando el patrocinio de la Buoncompagni, fue protegida de los los dos sucesores papales y recibió numerosos premios, incluido un medallón de bronce fundido con su retrato, por el escultor y arquitecto Antonio Felice Casoni, en 1611. Fue elegida miembro de la Academia de San Lucas, en Roma. Ciudad en la que falleció el 11 de agosto de 1614, acababa de cumplir los 62 años.
A pesar de que tanto Lavinia Fontana, como su coetánea Sofanisba Anguissola (1532-1625), recibieron más apoyo y ánimo que las mujeres de su tiempo, para proseguir sus respectivas carreras de pintoras, la clase social de la época no les permitía trascender las limitaciones de su sexo, (era inaceptable para una dama ver cuerpos desnudos) considerando que mermaba la posibilidad de estudiar la anatomía o el dibujo del natural, para realizar las múltiples y complejas composiciones requeridas para pintar escenas religiosas o cuadros de historia a gran escala, era prácticamente imposible.
Sorprende que Lavinia Fontana se atreviera a realizar los primeros desnudos, desafiando a la cultura machista del siglo XVII, sin duda era una mujer avanzada a su tiempo en muchos aspectos. Por ello es mas sorprendente y escalofriante que en el siglo XXI -cuando impera el erotismo y la dura pornografía- una red social se dedique a censurar el arte, mientras permite las escalofriantes escenas de guerras, terrorismo, hambre y maltrato. Sirva la obra de esta excepcional artista para restaurar los valores que no deben ser censurados.

(R.J.M./6.11.2016)
ALEGORÍA

sábado, 17 de septiembre de 2016

HOMENAJE A JULIE SOPETRÁN


La poeta Julie Sopetrán, recibió la Medalla de Oro
de la Democracia en Colombia.

¡Hola amig@s!
El pasado mes de agosto, me llegó una noticia extraordinaria, mi amiga Julie Sopetrán había recibido la Medalla de Oro de la Democracia, concedida por el Senado de Colombia. "Por ser una de las mejores poetas hispanoamericanas, por el empleo magistral de los moldes métricos del soneto, la fina sensibilidad y su particular estilo, sobre la cotidianeidad de los pueblos".




 En palabras del Honorable Gustavo Bustamante Morato. "La entrega de la Orden del Congreso, es la máxima condecoración que en nombre de la nación colombiana se otorga a los buenos ciudadanos. Ella es condecorada por haber abierto las puertas de dialogo entre la cultura antioqueña y la española. Y por los compromisos adquiridos para seguir siendo nuestra embajadora en España y países vecinos."


"El Concejo de Sopetrán la declaró hija adoptiva y honoraria de la ciudad. Los H. Concejales Lina Arteaga y JJ Lezcano le entregaron los acuerdos donde se declaran ciudades hermanas a los municipios de España: Almoharin, Jarandilla, Madrid, Hita y Torre del Burgo y se adiciona con sus nombres los que llevan nuestras calles, para que como embajadora los lleve a los alcaldes y ayuntamientos de esas localidades."



"La Biblioteca Pública Piloto, es el Centro de Cultura de Antioquia, ayer se vió habitada por los sopetraneros, quienes acudieron a las 6 pm a escuchar las historias de Julie Sopetran sobre los Sopetranes de España y de América. Fue muy concurrida, pues mas de ciento cincuenta paisanos, se asentaron a escuchar su historia y sus poesías".
(Gustavo Bustamante Morato)




De vuelta al Sopetrán de la Alcarria, le transmito a Julie, la alegría que siento por los honores recibidos, tan merecidos, el orgullo manifiesto y sentido por ella: Un viaje con el que soñó desde que era una adolescente y descubrió que en Colombia había otro Sopetrán. Me dice que, "nunca habría podido soñar todo el afecto y cariño que ha recibido de los colombianos, que sus paisajes son maravillosos y sus gentes encantadoras".

Se me escapa una irónica sonrisa, al decir que me ha sorprendido lo de ser nombrada "caballero", ella con su natural modestia, responde: que no hay distinción entre "caballero y dama", que le dijeron era la primera española a la que se le otorga. Le contesto que, posiblemente, es la primera mujer merecedora de tal galardón y no les dio tiempo a cambiar caballero por dama en el pergamino. lo importante es que ha venido encantada de Colombia y de sus gentes.

Por otros medios, he sabido que la noticia de su estancia en Sopetrán, trascendió por toda Antioquia a través de la prensa, incluso la TV colombiana de Medellín estuvo presente en la conferencia y posterior recital, donde se llenó el aforo. Casi no me atrevo a preguntar que repercusión ha tenido entre la prensa española haber obtenido una Medalla de Oro refrendada por el Senado colombiano a una poeta española. No puedo verla, pero sé que una sombra de tristeza atraviesa su mirada para decir: Ha sido la callada, por respuesta. Nadie es profeta en su tierra y menos si de cultura se trata, aunque haya llevado tan lejos los nombres de nuestros pueblos.

A mi mente viene el recuerdo de una entrevista que le hizo Loli Salvador, para "Las cien puertas de Eunate", le preguntó: ¿Cree que se gana o se pierde con el éxito? a lo que Julie, contestó.
-Depende. Para mi el éxito no es resultado, ni fama, ni fin, es vivencia, es fuerza y también debilidad de vivir cada día el poema. Tener éxito es acercarme a la niña que soy en un tiempo habitado por la poesía del día a día. Es tener esa capacidad de asombro, esa libertad de disposición para vivir el presente, aunque nadie se entere ni te conozca.

Querida Julie, deseo que este gran éxito que ya forma parte de tus vivencias, te ayude a mantener el espíritu con el asombro y la capacidad creativa de la que muchas veces he sido testigo. Espero que pronto podamos brindar por éste y por nuevos éxitos.

Para terminar este pequeño homenaje a Julie Sopetrán, os dejo uno de sus últimos sonetos y su fotografía.


    ESE MOMENTO...
Es igual que un suspiro que me trae la brisa
de la tarde rosada; me quedo confundida;
pocas veces se siente placentera la vida
pocas veces o al rato, la percibo sin prisa.
Recibí aquel instante... fue al norte de tu risa
en ese bello lapso, cuando el sueño convida
a sentir el revuelo de algún ave perdida
que despierta el deseo de una pose indecisa.
Era un soplo, un espacio presentido a deshora
un momento de magia, tan fugaz como eterno
era, como si el aire, me dibujara esquemas
como un algo de aquello que es el aquí y ahora
y me fuera pasando las hojas de un cuaderno
en blanco, siempre en blanco, para escribir poemas.


©Julie Sopetrán
Para ver más sobre la Autora: Eltiempohabitado´s Weblog

(M.R.J./ 16.9.2016)



viernes, 29 de julio de 2016

YMA SUMAC, EMPERATRIZ DEL CANTO



YMA SUMAC
Zoila Emperatriz Chávarri del Castillo

Cajamarca Ichoacan 13 de septiembre,1922 – Los Ángeles 1 de Noviembre 2008
Sus padres fueron Sixto Chávarri y Emilia del Castillo Atahualpa. Fue una soprano conocida por su inusual registro vocal, que llegó a abarcar un poco más de cuatro octavas. Tuvo un gran éxito internacional en los años cincuenta. Además de destacarse por su belleza y exotismo, decía ser nada menos que una princesa ñusta. descendiente del último Inca Atahualpa, por vía materna, hecho que fue confirmado por el cónsul general del Perú en los Estados Unidos.Es la única peruana que tiene su nombre inscrito en el Paseo de la Fama de Hollywood.
Se dice que de niña trataba de imitar el canto de los pájaros, iniciándose así su pasión por el canto. A los trece años, descubiertas sus dotes vocales y con apoyo del Ministerio de Educación pasó a vivir en Lima, capital del Perú. Su primera aparición en la radio fue en 1942. Ese mismo año contrajo matrimonio con Moisés Vivanco, compositor y director de la banda, "Compañía Peruana de Arte", integrada por 40 danzantes nativos, cantantes y músicos.
En 1946 viajaron a Nueva York, como "Trío Inca" Taky, Ima, Moisés y Cholita Rivero, prima de Sumac, como contralto y bailarina. Su repertorio consistía en canciones del folklore andino y otras compuestas por su marido.
Yma Sumac tenía un amplio registro vocal. No hay evidencias de las notas más graves y más agudas de su registro. En la canción «Chuncho» alcanza cuatro octavas más un semitono.
En 1954 participa en la película: "El secreto de los incas", con Charlton Heston y Robert Young, donde interpreta los temas «Taita Inty», «Ataypura» y «Tumpa». En 1955 publica Mambo!, con ritmos afrocubanos. En julio de 1955, el Gobierno estadounidense le concedió la ciudadanía estadounidense. En 1958 se separó de su marido, el músico Moisés Vivanco.
En 1961,consiguió hacerse popular en la Unión Soviética, donde grabó un disco en directo acompañada por la Orquesta Sinfónica del Teatro Bolshói. Una década después, en 1972, grabó un disco de rock, Miracles. Durante los años siguientes continuó actuando, aunque esporadicamente, en Estados Unidos, Perú y Canadá. En 1987 grabó el tema «I wonder» con el productor Hal Willner para el disco Stay Awake, con versiones de varios artistas de temas de películas de Disney.
El 2 de mayo de 2006, después de tres décadas de alejamiento y contando con 84 años de edad, gracias a la iniciativa de Miguel Molinari (reconocido crítico y promotor cultural), retornó al Perú para recibir una serie de condecoraciones del Gobierno de este país y otras autoridades y organizaciones culturales. La soprano permaneció durante quince días en el país, visitando Cuzco y Machu Picchu. Un reconocimiento tardío, después de haber llevado el nombre de Perú por todos los países.
Yma Sumac falleció en Los Ángeles el 1 de noviembre de 2008 tras seis meses de lucha contra el cáncer de colon. Por deseo de la cantante y de sus parientes más cercanos fue inhumada en Hollywood, donde había pasado 60 años de su vida.

https://youtu.be/5iH8j8sqVqQ

Críticas y comentarios:
Manuel de Falla, (1876-1946) después de escucharla, advirtió que Yma Sumac debía cantar con su voz natural y evitar a los profesores de canto.
Arthur Fiedler ―conductor de la afamada orquesta Pop de Boston― quedó impresionado al oírla y envió a su hermana, Elsa Fiedler, para que le enseñara a leer música y a hablar en el idioma de los músicos profesionales. Él tampoco quiso meterse con su voz.
Yma Sumac domina la sensibilidad artística de todo Brasil con su mágica y divina voz los problemas de nuestro mundo moderno son olvidados a través del magnetismo de este regalo fabuloso, el que viene a nosotros descendiendo directamente de Atahualpa, último rey inca. Diario O Globo (Río de Janeiro, 1944)
"En raras ocasiones, ha habido voces de cuatro octavas en la ópera, cada cantante se ha limitado a un solo rango en el que se sienten más cómodas. Yma se siente igualmente cómoda en cualquiera de sus cuatro voces". Max Rudolf, secretario musical de la Compañía Metropolitana de Opera de Nueva York
"No hay voz como esta en el mundo de la música de hoy. Tiene una escala más alta que cualquier voz femenina de concierto u ópera. Se encumbra dentro de la estratosfera acústica, o aploma al subcontralto profundo de tono con igual facilidad. Tales voces sobrevienen sólo una vez en una generación." Glenn Dillard Gunn, crítico de música del diario Times-Herald (Washington DC)
Su voz tiene indudablemente gran belleza y su técnica vocal es impecable. Canta en notas muy graves y cálidas, y muy altas como trinos de pájaros, y sus tonos medios no son menos encantadores que los extremos de su registro. Ninguna de las notas que emitió fue desagradable o desafinada. Sin duda, sus atributos naturales son tan grandes y su técnica tan sólida que sólo queda lamentar que no se hubiese dedicado al gran repertorio de la música; su lugar está en los grandes teatros de ópera.
Virgil Thomsom, crítico musical del diario Herald Tribune (Nueva York, 1954)

En Villa Rosa.
 "Yma Sumac". La voz del mundo, estuvo el martes 8 de junio de 1954, en el suntuoso Jardín de fiestas madrileño, en Villa Rosa (en la Carretera de Canillas, esquina a la actual calle López de Hoyos) Solo por seis días estuvo la impresionante voz de la exótica princesa inca, la más famosa artista del siglo veinte..."
https://youtu.be/actk--D28G0

miércoles, 3 de febrero de 2016

ISABELLA COLBRAN. Cantante y compositora

Isabella Colbran
Johann Baptist Reiter,c. 1835

(Madrid, 2-2-1785/ Bolonia, 7-10-1845)

  
   Era hija del violinista John Colbrandt, músico de la Capilla Real de la Corte. Comenzó sus estudios de canto en Madrid donde debutó. A los veinte años había alcanzado fama en toda Europa por la coloratura de su voz, fue considerada la mejor mezzosoprano y soprano dramática, musa y esposa de Rossellini.

   Isabella se trasladó a Italia para proseguir sus estudios, fue en Nápoles donde se convirtió en la prima donna de la compañía Teatro di San Carlo, cuenta entre sus admiradores al rey de Nápoles y un público que la adora. Con el tiempo se convirtió en la amante del empresario del teatro, Domenico Barbaia, quien logró salones de juego y Colbran, desarrolló una afición por los juegos de azar.

   Para complementar el talento de Isabella, el empresario firmó con Gioachino Rossini un contrato de siete años como compositor de óperas. A su llegada a Nápoles, compuso especialmente para ella el papel protagonista de Elisabetta, "Elizabeth, reina de Inglaterra". Su siguiente ópera fue "Otello, ossia il Moro di Venezia" en la que Colbran cantó el papel de Desdémona. Su popularidad demandaba continuas actuaciones. En 1815 coincidiendo con la llegada de Rossini, la soprano abandonó a Barbaia para irse a vivir con el compositor. En una estrecha colaboración musical creó para Isabella el rol de Desdémona en Otello (1816), Lisetta en La Gazzetta (1816), Armida (1817), Elcia en "Moisés en Egipto" (1818), Zoraide de "Ricciardo e Zoraide" (1818), el titular de Ermione (1819), Elena en "La donna del Lago" (1819), Anna en "Maometto Secondo" (1820) y el titular de Zelmira (1822) Aunque su voz pronto comenzó a mostrar signos de tensión, Colbran continuó teniendo una carrera fértil.

   En 1821 Isabella y Rossini, siete años menor que ella, dejaron Nápoles y se fueron a vivir en Londres. Al año siguiente volvieron a Italia para casarse el 16 de marzo de 1822 en Castenaso (Bolonia), donde la cantante tenía una villa. Al año siguiente el compositor escribió y diseñó una ópera que disfrazaba el talento ya en decadencia de Colbran "Semiramide" (1823) fueron tan malas las críticas del público y la prensa, que ella decidió abandonar la escena. Tras el fracaso en el Teatro La Fenice de Venecia, Semiramide sería también la última ópera que Rossini compuso para Italia y para Isabella Colbran.

   El matrimonio se fue a vivir a París, nunca habían encajado bien y las desavenencias domésticas eran continuas. En 1837 se separaron, Rossini había comenzado una relación con una modelo de artistas Olimpe. Compuso tres obras más "Il viaggio a Reims, Le conde Ory y Guillermo Tell", sufría neurastenia y abandonó su carrera.

   Las descripciones que hacen de la voz de Colbran caracterizan el timbre como "dulce, suave" con un rico registro medio. La música de Rossini para ella sugiere un dominio perfecto de trinos, medias trinos, staccato, legato, escalas ascendentes y descendentes, y la octava saltos. Su rango vocal se extendía desde fa sostenido por debajo del pentagrama a E anteriormente, la máxima F a veces disponibles.

   Colbran compuso una colección de cuatro canciones: dedicadas a la emperatriz de Rusia, a su maestra Crescenti, a la Reina de España y al príncipe Eugène de Beauharnais.

   Tras la separación, ella se fue a vivir a la finca de su padre, ya fallecido. Había contraído gonorrea y perdió casi todas las posesiones debido a su afición al juego, Rossellini nunca dejó de ayudarla. Isabella Colbran murió en 1845, a los sesenta años y fue enterrada en la Cartuja de Bolonia. El compositor, se casó al año siguiente con Olympe Pélissier.

   Isabella era tía materna de Julia Espín Colbrandt, quien fue uno de los amores platónicos de Gustavo Adolfo Bécquer.
(R.J.M./2.2.2016)







lunes, 11 de enero de 2016

LUISA ROLDÁN, La Roldana.

 
                                              Primeros pasos de Jesús
                                               (Museo de Guadalajara)

Escultora de Cámara real
Sevilla 1652/ Madrid 10-1-1706

   Luisa Ignacia Roldán Villavicencio. Fue una de las principales figuras de la escultura religiosa del Barroco de finales del siglo XVII y principios del XVIII, unica mujer a la que se dió el título de escultora de la Cámara del rey, conocida con el sobrenombre de "La Roldana".

   Nacida en Sevilla, fue bautizada el 8 de septiembre de 1652, falleció en Madrid, el 10 de enero de 1706. Fue la quinta hija de los doce que tuvieron el matrimonio formado por Pedro Roldán y Teresa de Jesús Villavicencio, cuatro de los hijos fallecieron. Su padre dirigía uno de los talleres de imaginería más importantes de la ciudad hispalense, al que no dejaban de llegar encargos para la catedral.

   Desde niña, Luisa aprendió a dibujar y moldear pequeñas figuras de terracota, sus dos hermanas Manuela y Francisca coloreaban las figuras en el taller familiar. Tenía dieciocho años y se había convertido en una experta manejando la gubia y el cincel, también se había enamorado de un aprendiz llamado Luis Antonio Navarro de los Arcos, su padre se opuso a la relación, a pesar de habérselo pedido el novio. Tal vez no le faltaban motivos para negarse, aunque no llegó a exponerlos.

   Luisa y Luis Antonio se prometieron en matrimonio, aún sin el consentimiento paterno. Así se lo hizo saber al procurador de tribunales y este, en nombre de Luis Antonio, hizo la petición ante el Juez de la iglesia, de querer contraer matrimonio con Luisa Ignacia Roldán «con la que había tratado de requiebro de dos años a esta parte, dándose palabra de casamiento el uno al otro» y deseando que su matrimonio fuera «según orden de nuestra Santa Iglesia», solicitaba que un alguacil del arzobispado fuera en busca de Luisa y llevada ante el juez para que declarara si había dado palabra de casamiento. Varios testigos afirmaron estar presentes cuando se dieron ambos la palabra de casamiento en la noche del 15 de diciembre.

   Ese mismo día, fue el alguacil Juan Nieto a buscar a Luisa Roldán para llevarla ante el juez, después de su declaración, en la que entre otras cosas dijo que nunca había estado casada, que era «moza doncella», que no era pariente de Luis Antonio, que no tenía voto de castidad y que a pesar de haber dado palabra de casamiento a Luis Antonio, no lo podía cumplir por la negativa de su padre a este matrimonio. Realizada esta declaración, el juez mandó que se llevara a la joven a casa del dorador Lorenzo de Ávila, para «tenerla en su poder con la guarda y custodia necesaria y que no la entregara a persona alguna sin licencia y mandamiento judicial». El 17 de diciembre de 1671 y delante de notario se produce una declaración similar por parte de Luis Antonio de los Arcos. Este suceso, fue conocido como "el rapto de La Roldana por el aprendiz Luis Antonio de los Arcos". A la boda no fue el padre de la novia.


   Después del casamiento, se fueron a vivir a una casa propiedad de la familia de él. Luisa continuó trabajando, aunque por razón de la época, los contratos eran firmados por su marido. Su escultura fue de temática religiosa, trató de humanizar el arte en las imágenes. Realizó tallas de tamaño natural para procesionar, en madera o de barro cocido con policromía, muchas de ellas eran de las llamadas «de candelero» o para vestir, así como también otras de pequeños grupos de devoción para particulares y conventos, con gran movimiento y expresividad, plenas características del arte barroco. Ejecutó numerosos belenes en terracota de estilo italiano, formando una escena como grupo escultórico unido.

   En 1686 se trasladan a Cádiz para realizar diversos trabajos encargados por el cabildo municipal y catedralicio, entre ellos los santos Patronos san Servando y san Germán, en la peana de uno de ellos, se encontró un documento donde se lee: "Diseñado por Pedro Roldán, hecho por Luisa Roldán y estofado (dorado) por Luis Antonio de los Arcos".

   A principios de 1689 el matrimonio junto con dos hijos (los otros cuatro habían fallecido) se trasladan a Madrid en busca del reconocimiento oficial y una mejor situación económica. El 28 de febrero de ese año nace su séptima hija, Maria Bernarda, bautizada en la parroquia San Bernardo. De estos primeros tiempos en Madrid es la obra "El descanso en la huída a Egipto" (hacia1691) con temas iconográficos tomados de un dibujo de Miguel Ángel y de una obra del Veronés. Esta obra de Luisa es nombrada como «La Sagrada Familia de la colección Güell»

   Con la realización de estos pequeños grupos escultóricos, la familia consiguió ir viviendo, mientras esperaba que el rey Carlos II la nombrase escultora de cámara. El nombramiento llegó el 15 de octubre de 1692, lo que representó su prestigio oficial y un salario anual de 100 ducados anuales, pero el pago no llegaba y tampoco los trabajos a particulares conseguía cobrarlos. La situación general del reino era precaria. Comenzó a enviar peticiones al rey, en el año 1693 le solicitaba la concesión de unas habitaciones en las casas del Tesoro, donde vivían una gran parte de los artistas de cámara del rey – "ya que no tenía dónde vivir con sus hijos".

   En 1697 pasó a dirigir las cartas a la reina Mariana de Neoburgo, pidiéndole "que le diera vestuario o una ayuda de costa, por estarlo pasando con estrecheces, pues muchos días falta para el sustento diario". Luisa, tras el nombramiento, comenzó a firmar sus trabajos como "Escultora de Cámara". Luis Antonio, su marido, confirmó las sospechas del padre, no pasaba de ser un escultor mediocre, pendenciero, borracho y derrochador, que cuando solicitó al rey el puesto de "ayudante del furriel" para paliar la miseria de la familia. Se le contestó: "no hay ninguna plaza vacante".


   En 1692, Luisa recibe el encargo de Carlos II para realizar la obra "Arcángel San Miguel con el diablo a sus pies", que formaría parte del conjunto escultórico del Monasterio de San Lorenzo del Escorial, donde hoy se puede contemplar. La escultura, que es de madera policromada y algo mayor que el natural, muestra al Arcángel venciendo al demonio al que tiene bajo sus pies, todo ello con gran movimiento y dramatismo. La genial escultora decidió poner las cosas en su sitio y ponerles cara a los protagonistas de su obra: representó a San Miguel con su propia cara y le puso el rostro de su marido al diablo.

   Hubiese podido volver a Sevilla y le hubiese bastado solicitar trabajo a su padre, para no pasar calamidades pero, su carácter se lo impedía. Entre 1702 y 1705, realizó para el duque del Infantado, unas 149 figuras destinadas a un "Nacimiento" del Convento del Rosal, de Priego (Cuenca), hoy están desaparecidas. A pesar de su fama, Luisa nunca disfrutó de fortuna económica.

     El 5 de enero de 1706, estando gravemente enferma, el escribano da cuenta de la petición de Luisa: una declaración de pobreza en la que solicita ser enterrada por caridad en la Iglesia de san Andrés de donde es parroquiana, siendo su última voluntad que "si hubiese algún bien para heredar se lo den a sus hijos Francisco y María Bernarda, así como a su esposo Luis Antonio de los Arcos". No tiene fuerzas ni para firmar. Cinco días después fallece La Roldana, la única mujer escultora reconocida en tan temprana época, lo que no evitó la inanición.

    El mismo día 10 de enero de 1706, la Accademia di San Luca di Roma, la nombraba Accademica de Mérito a "Donna Aloisa de los Arcos (en el extranjero , a una mujer casada se la nombra por el apellido del marido), da Madrid, castigliana... por "Madonna di relievo di cretacotta fatta de sua mano coloritta". Nunca antes, ni después, se concedió ese título a una mujer española.
   Triste, que hoy como ayer, los títulos no den para comer, ni siquiera para una vida y muerte digna.

 (R.J.M./10.1.2016)



sábado, 5 de diciembre de 2015

Letralia nº 160 Año XI (19.3.2007) Venezuela

Mujeres en el umbral de la historia
 María Rosa Jaén
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Ensayo
Asociación de Escritores y Artistas Españoles
España, 2005
ISBN: 84-87857-37-X
240 páginas
    Publicado por la Asociación de Escritores y Artistas Españoles en su colección “La Fuente Sepultada” y con prólogo de Luis Alberto de Cuenca, el libro de ensayo Mujeres en el umbral de la historia se inicia con “Epístolas a las mujeres españolas de los siglos X al XVI”, dirigidas a árabes, judías y cristianas que vivieron en la Península Ibérica.
  En estas particulares cartas, María Rosa Jaén (Madrid, 1950) pretende recuperar los nombres de mujeres, desconocidas la mayoría de ellas, y de quienes muestra los trabajos sociales, laborales y literarios de la época. Incluye diversa documentación y fragmentos o textos relacionados con su quehacer acompañado de breves comentarios de la autora, que adopta la costumbre de expresar con flores el carácter de las destinatarias.



En “Mujeres hispano árabes” dice la autora: “Aunque la lírica es el género que mejor se ha adaptado a la idiosincrasia femenina, el florecimiento de la cultura hispano-musulmana favoreció también el acceso al mundo científico. Sabemos que entre ellas hubo quienes practicaron la medicina en la Córdoba del siglo IX y en el padrón elaborado en Cuenca, en 1453, figura una física mora, aunque desconocemos su nombre, no así el de la astrónoma Fátima al-Magerit”.

En “A las trabajadoras medievales hispano-judías y moriscas” podemos conocer la forma de vida de las mujeres del pueblo llano, sus oficios: regatonas, panaderas, pastoras, sirvientas, hilanderas, juglaresas, rameras. Las distintas condiciones sociales de solteras, casadas, viudas y malcasadas. La acreditación profesional en medicina y cirugía de las mujeres judías.
En la última sección se ofrecen particularidades de “Algunas mujeres históricas”, como doña Juana de Mendoza y su peculiar matrimonio, de doña Isabel I de Castilla y León, sus hijas. Destacadas mujeres de la familia Borja (Borgia). Entre las “Primeras voces literarias” figuran los nombres de Florencia Pinar, María Sarmiento o Teresa de Cartagena, la primera escritora que defendió su derecho a usar la pluma. La importancia de los testamentos en la literatura de doña Leonor López de Córdoba y doña Beatriz Galindo, más conocida como La Latina.

La autora, María Rosa Jaén, empezó a escribir cuentos a los doce años. Estudió secretaría administrativa, tomó diversos cursos y ejerce como profesora de teatro infantil en varios colegios. Entre 1983 y 1985 colaboró con la revista República de las Letras, de la Asociación Colegial de Escritores. Ha estado vinculada a diversos grupos y tertulias poéticas, como la Agrupación Hispana de Escritores, la AETIJ,  OEPLI,  la Asociación Prometeo de Poesía y otras. Participó en las I y III Bienales internacionales de Poesía (1987 y 1992) y en el I Encuentro de la Academia Iberoamericana de Poesía (Puerto Rico, 1991) tiene publicados varios libros de poesía y teatro infantil, así como artículos, narraciones y ensayos. Ha dado recitales poéticos y conferencias sobre mujeres españolas de distintos siglos en el Ateneo de Madrid, asociaciones de escritores, bibliotecas públicas, centros culturales y en las facultades de Derecho y Ciencias de la Información de la Universidad Complutense de Madrid (UCM). Figura en el Diccionario de Escritores  en Lengua Castellana (Cedro, 2004) y en el de la Cátedra Miguel Delibes.

miércoles, 25 de noviembre de 2015

ESPERANZA FEMENINA


 (Todos los días deberían ser el de la No Violencia)
25.11.15

No he visto tus ojos, por el sonido adiviné
que tus pasos se modulaban a su compás,
él iba fatalmente a tu encuentro
y agazapaste los pliegues de tu rostro
para asumir, una ciega confianza en el porvenir.

Es fácil decir, sólo tienes que dar un paso.
Cuando sientes las yemas de sus dedos
y rehusas su jadeante apremio.
Entonces, dejas que todo se llene
de un miedo innumerable, en torno tuyo.

Ha pasado el tiempo oscuro y renaces.
Si su madre no se hubiese tomado la molestia
de hacerle conocer la luz, 
el buitre, tal vez ...

Aún podrías mirar sin desconfianza 
la ajada foto con el ramo de gardenias

y aquel vals que tropezó en tu tobillo
cubriéndote de aretes, se soltaría.
Es tiempo de partir y fondear en un lugar
donde no se escuchen amargas sirenas,
un trozo de tierra que te permita alterar
el odio en la albahaca, en duraznos
y música de castañuelas.


M. Rosa Jaén Publicado en "ALJIBES"
(Antología poética 2002)
Agrupación Hispana de Escritores, Madrid.